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Paulina Aguirre vuelve a grabar con Manzanero

Paulina Aguirre se alzó con un gramófono dorado a principios de mes por “Esperando tu voz”. La producción incluye “Cuando me vaya de aquí”, a dúo con Manzanero, que le valió en octubre el Premio ARPA de la Academia Nacional de la Música y las Artes Cristianas de México a la mejor canción con invitado.

Su tercer disco incluirá el tema “Tú” de Manzanero, que probablemente grabe en febrero, dijo a la AP la artista en Los Angeles, donde reside.

“Fue maravilloso (trabajar con Manzanero). Espero poder hacerlo de nuevo pronto”, expresó.

Aguirre conoció a Manzanero a través de su esposo y productor, Pablo Aguirre, quien trabajó con el creador de “Somos novios”, “Contigo aprendí” y “Esta tarde vi llover” en su disco “Nada personal”.

A excepción del tema del renombrado compositor y uno de su esposo, los otras ocho de “Esperando tu voz” son de la autoría. Aguirre también compuso todas las canciones de su primer álbum, “Mujer de fe” (2006), postulado al Latin Grammy en el 2007.

La cantautora de 32 años, primera ecuatoriana en ganar el Latin Grammy, ha conseguido estos logros a menos de seis años de haber emigrado a Estados Unidos.

“Ha sido una bendición. Dios ayuda cuando uno tiene muy claro lo que quiere hacer y lo hace … Uno tiene que tener talento pero también disciplina”, dijo la artista.

Relató que comenzó a componer canciones desde “muy jovencita”. En 1996 un tema de su autoría quedó en tercer lugar en el Festival de la OTI y dos años después otro llegó a las finales.

Tras haber integrado bandas ecuatorianas no cristianas que fusionaban música tradicional, decidió lanzarse como solista y llegó a abrir conciertos de Juan Luis Guerra, Miguel Bosé, el grupo mexicano Garibaldi y la banda australiana INXS.

Luego estudió becada en la prestigiosa escuela de música de Berklee, en Boston, y también trabajó como corista de Marco Antonio Solís, Gloria Trevi y Luis Miguel.

Ahora, con un Latin Grammy en sus manos, quiere seguir luchando por universalizar su mensaje y zafarse del encasillamiento religioso sin dejar de ser “hija de Dios”.

“El problema con la música cristiana es que el mensaje religioso no llega a toda la gente. Los temas de ‘Aleluya’ y ‘Gloria a Dios’ son preciosos para cantarlos en la iglesia y siempre voy a honrar el cristianismo, pero es importante poder llegar a más gente”, resaltó Aguirre, quien quiere componer temas de amor que apelen a cristianos y no cristianos.

“No voy a dejar de ser cristiana. Pero yo tengo mi visión muy clara, que es hacer mensajes más universales”, añadió.

 

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